En un mundo cada vez más globalizado, con una gran movilidad geográfica de los habitantes, el bilingüismo es un hecho que ha dejado de ser aislado para convertirse en no sólo frecuente, sino buscado deliberadamente.
Y es que como padres, una de las cuestiones que más nos preocupa en la educación de nuestros hijos es el aprendizaje de más de una lengua. Sabemos que eso va a favorecer sus posibilidades laborales en un mundo competitivo donde es importante distinguirse.
Así pues, la moda del bilingüismo hace ya tiempo que llegó a las escuelas. Sin embargo, hasta no hace mucho tiempo no estaban claras las consecuencias intelectuales de crecer conociendo más de una lengua. Se pensaba que aquellas personas que crecían en entornos multilingües tenían mayores dificultades académicas.