Acaba de aterrizar en Madrid la obra de teatro “El curioso incidente del perro a medianoche” (Teatro Marquina) basada en el best seller de Mark Haddon.
Para no desentramar toda la historia sólo haré referencia a la primera escena a partir de la cual se desarrolla. Christopher Boone, así se llama el protagonista, es un adolescente de 15 años con TEA (Trastorno de Espectro Autista) que acude a un Colegio de Educación Especial.
Tras el supuesto asesinato de Wellington, el perro de su vecina, su profesora le propone un ejercicio de redacción en donde él irá describiendo cómo va a averiguar qué ha sucedido. La nueva aventura en la que se adentra es una historia sobre el descubrimiento y el crecimiento, sobre la superación, la ternura, y la amistad.
Lo especial del libro y la obra es la manera en la que está narrada, desde la peculiar forma que él tiene de entender y relacionarse con su entorno. Ofrece una oportunidad de acercarse al pensamiento y funcionamiento de una persona con TEA. La obra está marcada por ternura, ingenio y humor.