La terapia asistida con animales es un tipo de terapia que, desde hace algún tiempo, está cobrando una gran importancia debido a la cantidad de beneficios que se ha podido comprobar que tiene. En este artículo, vamos a explicar alguno de estos beneficios y en qué consiste este tipo de terapias, para un perfil de personas en concreto, en este caso, niños que presentan un diagnóstico de TDAH.
¿Qué es TDAH?
El Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad es un trastorno de origen neurobiológico, cuyo inicio comúnmente se da en la infancia y cuyos síntomas pueden perdurar hasta la edad adulta. Actualmente, es uno de los trastornos psiquiátricos con mayor prevalencia y es uno de los motivos más frecuentes a la hora de visitar un psicólogo, debido a las múltiples consecuencias que suele presentar en los diferentes ámbitos de la vida de la persona que lo padece.
Este trastorno tiene dos componentes fundamentales: por un lado, está la inatención y desorganización y, por otro, la hiperactividad. La inatención y desorganización se suele presentar como desviaciones de las tareas, falta de persistencia, dificultad para mantener la atención o desorganización. La hiperactividad es una actividad motora excesiva en situaciones no apropiadas, juegos, golpes o locuciones excesivas.
Debido a estos dos componentes, existen diversas formas de presentación del trastorno en los individuos:
- Presentación combinada: se cumplen criterios tanto de inatención, como de hiperactividad – impulsividad durante los últimos seis meses.
- Presentación predominantemente con falta de atención: se cumplen los criterios de inatención, pero no los de hiperactividad – impulsividad, durante los últimos seis meses.
- Presentación predominantemente hiperactiva/impulsiva: si se cumplen los de hiperactividad – impulsividad, pero no los de inatención, durante los últimos seis meses.
¿Qué es la terapia asistida con animales (perros)?
Es un tipo de terapia o intervención en la que se incorpora un animal, en este caso, un perro, como una parte más del proceso terapéutico, con el fin de promover las mejoras en diferentes aspectos de la vida (funciones físicas, funciones psicosociales, funciones cognitivas…) de la persona que demanda la terapia. Los objetivos que se quieren trabajar en sesión, previamente definidos, incluyen o incorporan de alguna manera a estos animales. El motivo de inclusión de los perros como herramienta terapéutica, se debe a que son catalizadores de la motivación de los individuos.
Con este tipo de intervención, es posible tratar múltiples trastornos, tanto físicos como psicológicos, como pueden ser la parálisis cerebral, los trastornos generalizados del desarrollo, esclerosis múltiple, lesión medular, TDAH, autismo, síndrome del alcoholismo fetal…
TDAH y terapia asistida con perros
Actualmente, la terapia asistida con animales es un tema que cada vez está tomando más fuerza, ya que hay evidencias de los beneficios que presenta.
Algunas de las evidencias que se encuentran son las siguientes:
- Un descenso de la frecuencia cardiaca y la presión arterial en las personas que están en presencia de un perro.
- Una mejora en las habilidades sociales, los comportamientos sociales y los comportamientos problemáticos en niños en presencia de perros.
- Una adquisición de habilidades básicas aplicables a las relaciones humanas.
- Una mayor reducción de los síntomas de TDAH, en comparación con terapias convencionales.
- Una mejora en el autocontrol, la autorregulación y la autoevaluación del comportamiento.
- Mejora en la solución de problemas.
- Mejora de la comunicación, de la autoestima y del locus de control interno.
Por Alba Fernández Suárez
