¿Madre y Profesora?

Por Miryam González

¿Madre o profesora?,pues las dos cosas a la vez.

Soy profesora de primaria y cuando se planteó la posibilidad de poder dar clase a mi hija en 1º, no lo dudé. Me encontré con ciertas dificultades por parte de la dirección, pues consideraban que era un error ejercer ambos papeles a la vez, pero después de algunas conversaciones me dieron luz verde para poder seguir con la idea.Me parecía una experiencia única.

Las madres y los padres siempre dicen que les gustaría tener una cámara en la clase para poder ver cómo se comportan sus hijos dentro de la escuela y mi profesión me brindaba la posibilidad de experimentarlo en primera persona.

Lo primero que pensé fue en cómo le afectaría a mi hija compartir a mamá con sus demás compañeros. Fue un aprendizaje para ella saber que mamá en clase, no ejercía como tal, sino como la profe y la verdad es que lo integró muy bien en su rutina diaria, no le supuso ninguna dificultad ver que la profe podía dar besos y cariños a todos los alumnos igual que a ella, sabiendo que luego tendría más fuera del cole.

El trabajo para mí fue saber dejar las cosas del cole en el cole. De tal manera que a la salida seguíamos con las mismas rutinas de años anteriores, ¿qué tal hoy en el cole?¿qué has hecho?¿cómo te lo has pasado?¿a qué has jugado?, una vez que nos montábamos en el coche, la profe se quedaba en el cole y llegaba mamá, que no sabía las cosas y sobre todo las vivencias y las experiencias de su vida escolar. Los problemas y las incidencias dentro de clase se veían bajo otro prisma, tenía un espacio para contar las cosas según su punto de vista único, al ser suyo propio y no el del grupo.

Mi hija aprendió que en el cole mamá se llama Miryam, pero al mismo tiempo también sabía que cuando se caía o tenía un enfado con un compañero, había un extra de cuidado, un punto de seguridad ante una situación complicada.Fue una experiencia muy positiva para ambas, tanto, que cuando llegó su hermana a la misma situación, no dudamos en repetir.

Aunque cada hija es diferente, la pequeña estaba muy ilusionada en repetir las experiencias de su hermana y poder tener a mamá de profe. No está siendo exactamente igual, pero sí muy parecido. Cuando salimos del cole y les pregunto qué tal el día, la pequeña siempre dice: “pero mamá ¡si hemos estado juntas!”, yo le insisto en que yo no estaba en clase, allí estaba la profe, así que me cuenta cómo ha visto las cosas desde su punto de vista único y personal.

También estoy aprendiendo a conocerlas desde otra perspectiva en la que los padres estamos excluidos, o tenemos una información de segunda mano que nos dan los profesores. Ha sido con la mayor y está siendo con la pequeña una gran experiencia de la que estoy disfrutando y saboreando, sabiendo que, a medida que crecen, habrá muchas cosas que no podré compartir con ellas en primera persona, tendré que esperar a que sean ellas quienes decidan contármelas o no, respetando sus propios tiempos.

Este nuevo camino lo iremos descubriendo también juntas, pero esta vez solo será mamá la que escuche y dé un abrazo o un beso.